Reseña de Expertología de Andrés Pérez Ortega
Hace tiempo que sigo las andanzas de Andrés Pérez Ortega, el personal branding sherpa, como le gusta definirse, y la verdad es que no puedo más que afirmar que es uno de los mayores expertos en marca personal de España.
Andrés es una persona con carácter a la que le gusta decir las cosas por su nombre y en sus charlas se oye alguna que otra frase para provocar un estado más receptivo de su audiencia, y es gracias a este lenguaje cercano y a sus vivencias y explicaciones, que hace muy interesante el tema de la marca personal.
Andrés Pérez Ortega, personal branding sherpa
Andrés es experto en una temática cada vez más de moda y cada vez más relevante para los profesionales que quieren hacerse un hueco en el difícil mundo laboral, y si ya es importante para un profesional no independiente, para los que somos emprendedores la marca personal puede significar un enorme empujón a nuestras aventuras y darle más credibilidad y visibilidad a nuestra trayectoria, a nuestro trabajo y a nuestros proyectos.
Estamos en una época de transición entre la era industrial y la era digital, y los paradigmas que eran válidos hasta ahora ya no lo son, empezando por la enseñanza que se ha quedado totalmente obsoleta, formando recursos humanos anónimos de bajo coste e intercambiables en vez de profesionales creativos con marca personal.
Antes de pasar a la propia crítica del libro os recomiendo pasaros por su blog donde podéis leer artículos muy interesantes sobre el tema.
Expertología, la ciencia de convertirse en un profesional de referencia
Expertología es el segundo libro de Andrés, también escribió Marca Personal para dummies, y es toda una guía para labrarse una marca personal sostenida sobre el contenido más que sobre el continente.
El libro cuenta con una interesante introducción que sirve de contextualización del problema de los recursos intercambiables, planteando la necesidad de hacernos destacar por nuestro trabajo como expertos para diferenciarnos del resto. Los siguientes capítulos guían al lector hacia el camino para tener una marca personal sólida:
- Plan: lo primero es lo primero, y sin un plan no vamos a llegar muy lejos. Como con cualquier proyecto necesitas trazar la estrategia a seguir para llegar del punto de inicio en el que te encuentras al punto al que quieres llegar.
- Persona: esta apartado es intrínseco a la marca personal, sin unas creencias y prioridades no podemos encontrar nuestro sitio ni siquiera a nivel profesional. Este apartado exige una evaluación sincera e íntima de tus valores personales.
- Profesión: aquí está la parte densa del asunto, como si fuera para una empresa tienes que diseñar tu producto, el qué y el cómo resultan imprescindibles. Para ser un experto tienes que diferenciarte de la competentecia.
- Posicionamiento: es importante escoger un conjunto de atributos que quieres relacionar con tu marca y por los que te conocerán.
- Público: una segmentación de mercado en toda regla, a qué perfil de personas te interesa dirigirte. No puedes gustar a todos pero puedes centrar tus esfuerzos a quienes te interesa vender tu producto.
- Promoción: si eres el mejor pero nadie te conoce, tu esfuerzo no valdrá para nada. Hay que ser bueno y además que la gente lo sepa. Hay muchas herramientas disponibles para darte a conocer.
Como epílogo hay un último capítulo que te invita a llevar todo lo aprendido a la práctica.
Además de ser un libro tan interesante como parece a primera vista por su contenido y su autor, es sumamente práctico ya que a lo largo de los capítulos Andrés propone una serie de ejercicios de lápiz y papel para ayudarte a dar forma a tu propia marca personal. Tanto si tienes las ideas claras como si todavía no sabes el camino a tomar, los ejercicios sirven para extraer de ti las sensaciones o ideas que tienes en la cabeza para poder definir un marca personal sólida.
Una característica que he encontrado muy interesante para emprendedores es trabajar con la gestión de proyectos aplicada al personal branding, ya que al estar familiarizados con estos conceptos se nos facilita la tarea de la creación de la marca.
A veces los emprendedores nos olvidamos de nosotros mismos en beneficio de nuestros proyectos, pero los proyectos vienen y van, en cambio nosotros siempre permanecemos, por lo que apostar por nuestra propia marca personal es un camino inteligente que al final le dará mayor solidez a nuestros proyectos, si somos reconocidos por nuestro trabajo nuestros proyectos gozarán en su lanzamiento de una mayor visibilidad y nos darán el beneficio de la duda.