Los 4 órganos de la comunicación de Randy Olson
Las últimas semanas he estado preparando mi nuevo taller práctico. Esta vez trata sobre la comunicación delante de una audiencia grande o pequeña. La cuestión es que he consultado multitud de libros y he leído un consejo que me ha calado hondo, quizás por mi forma de ser. “No seas tan cerebral” decía. Y me llamó mucho la atención los 4 órganos de la comunicación que posteriormente se describían.
Para “enganchar” con tu audiencia tienes que saber que las personas tenemos dos atractivos: el analítico y el emocional.
Tabla de contenidos
El atractivo analítico está en PRIMER ÓRGANO: la cabeza.
Las personas que piensan más con la cabeza le echan a la vida una gran cantidad de lógica y análisis. Hacen sus cábalas, todo lo calculan, reflexionan más y se contradicen menos, piensan antes de actuar.
El atractivo emocional reside en otros órganos diferentes a la cabeza. La espontaneidad, la creatividad, la intuición… son algunas de las cosas que mueven a las personas con un mayor atractivo emocional. Estas personas también son más impulsivas y al pensar menos de manera racional, hacen que sus acciones tengan más riesgo pero a la vez, que supongan algo “mágico”.
Este atractivo emocional reside en SEGUNDO ÓRGANO: el corazón.
Hay público que se guía por el corazón. Son personas emocionales, son susceptibles a las historias con esencia, lloran cuando Heidi se reencuentra con su abuelo.
TERCER ÓRGANO: las entrañas.
Es aquí donde reside el humor y los presentimientos. Estamos más lejos de la cabeza y por lo tanto tenemos menos racionalidad. El público que se guía por las entrañas es impulsivo, a menudo se contradice, es espontáneo. Las entrañas te dicen “Cierra los ojos y tírate”. Son pensamientos que no han sido procesados analíticamente.
CUARTO ÓRGANO: la entrepierna.
Nos encontramos a mil millones de años luz de la cabeza, del razonamiento. Estos órganos carecen de lógica sin embargo su poder para conseguir que hagamos ciertas cosas es muy poderoso. Todos sabemos que “tiran más dos tetas que dos carretas”. Esta frase es la que resume tan gráficamente el poder de este cuarto órgano.
Todos tenemos una tendencia comunicativa natural y usamos más uno de estos cuatro órganos que el resto. Necesitamos mediante entrenamiento adquirir conocimientos sobre los otros órganos para atraer a un público más numeroso. Si sólo te comunicas desde la zona emocional, el público analítico no te comprará y viceversa.